planeta

No habrá fiestas para mañana porque estamos destruyendo el planeta. Es una frase que resume la urgencia de actuar frente al cambio climático y sus consecuencias devastadoras para la vida en la Tierra.

El cambio climático es una realidad científica que no podemos negar ni ignorar. Los datos son alarmantes: el aumento de la temperatura global en tierra, mares y océanos, el derretimiento de los glaciares, la subida del nivel del mar, la pérdida de biodiversidad, la desertificación, las sequías, las inundaciones, los incendios forestales, las hambrunas, las migraciones forzadas, las enfermedades, los conflictos y la pobreza.

Todo esto nos afecta a todos, sin importar dónde vivamos o qué hagamos. Somos responsables de lo que le estamos haciendo al planeta y a nosotros mismos. Somos responsables de cambiar nuestras acciones y hábitos para reducir nuestra huella ecológica y nuestra emisión de gases de efecto invernadero. Somos responsables de exigir a nuestros gobiernos y empresas que tomen medidas urgentes y eficaces para frenar el calentamiento global.

No podemos seguir viviendo como si no pasara nada. No podemos seguir consumiendo y desperdiciando recursos como si fueran infinitos. No podemos seguir celebrando y distrayéndonos como si no hubiera un mañana.

Porque el mañana está en juego. Porque el mañana depende de lo que hagamos hoy. Porque el mañana es nuestro y de las generaciones futuras.

No habrá fiestas para mañana porque estamos destruyendo el planeta. Pero es posible que aún podamos evitarlo si actuamos ahora. Podemos salvar el planeta si nos unimos y colaboramos. Podemos crear un futuro mejor si somos conscientes y solidarios.

Espero y deseo que con esta  parrafada les haya hecho reflexionar y que se sumen a la lucha contra el cambio climático. Porque juntos podemos hacer la diferencia. Porque juntos podemos revertir el proceso y celebrar la vida.

» En abril aguas mil » un refrán de tiempos inmemoriales que podemos cambiar por » abril el agua sigue sin venir «.

 

Queremos un cambio de sistema, no un cambio climático.

La tierra es más valiosa que el dinero.